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la cerca de la pista, viendo desde lejos cómo montaba Florian, y lo había visto caerse
algunas veces también, y pensaba que nadie fuera de la vieja Tierra sabía cómo se hacía
lo que él estaba haciendo. Una vez la potranca se había caído, un gran golpe, y Florian se
había desmayado durante unos instantes, totalmente inconsciente, pero se había
levantado y había dicho que no era culpa de la potranca, que el animal había tropezado,
él lo había sentido, y había seguido montando mientras ella y Catlin se quedaban ahí, con
las manos apretadas.
Ahora llevó a la potranca lejos de Florian, para hacer la primera salida de la potranca
en público y sabía que Florian estaba sudando y sufriendo con cada paso que daba,
consciente de que sera podía hacer tonterías; y que Catlin probablemente pensaba lo
mismo, sabiendo que si algo salía mal, sólo Florian podía hacer algo para remediar las
cosas.
Hoy cumplía catorce años y tenía demasiado público para arriesgarse a hacer una
tontería. Se mostró sorprendentemente juiciosa, montó al paso y siguió al paso, nerviosa
cuando la potranca trató de moverse más rápido. No, había dicho Florian, si trata de ir al
paso que quiere, no la deje, no debe ni sabe cómo hacerlo.
Florian le había dicho todos los movimientos que la potranca tendería a hacer y dónde
podía perder pie y cuándo iba a tratar de hacer lo que quisiera.
Así que Ari detuvo el movimiento en cuanto compendió lo que quería hacer la potranca,
no, no, la potranca tenía una manera de estirar el cuello contra la rienda y seguir como si
de pronto quisiera ir al trote unos pasos; estaba contenta de no haberla dejado correr la
primera vez; pero la potranca le obedeció bien cuando ella la detuvo.
No era el espectáculo que ella quería dar, claro. Ella quería llegar al galope y
asustarlos a todos; pero ésa era la parte de Florian, a ella le tocaba ser responsable.
Pasó al público, tan consciente de sí misma que casi no podía aguantarlo, odiaba ser
responsable; y el tío Denys probablemente estaba nervioso. Volvió donde se erguía
Florian, de pie junto a la cerca, y detuvo a la potranca porque él se estaba acercando para
hablarle.
 ¿Cómo voy?  preguntó Ari.
 Muy bien  respondió . Golpéela una vez levemente con los talones cuando está
caminando. Una vez, nada más. Mantenga firmes las riendas. Ese es el paso que sigue.
No la deje ir más rápido de eso. Nunca la deje hacerlo si usted no se lo ordena.
 De acuerdo  asintió ella. Hizo caminar a la potranca, un golpecito, después un
segundo.
A la potranca le gustó eso. Levantó las orejas y empezó a andar con un paso rítmico
que era más difícil de seguir, pero Ari logró mantenerse. Su cuerpo empezó; recordar de
pronto qué hacer con los movimientos más rápidos, encontró el equilibrio, recordó todo lo
que Florian le había dado, como pasaba con la cinta.
Ella quería soltarse, Dios, quería hacerlo todo, y la potranca también, pero siguió en
ese paso que la potranca consideraba suficiente y se detuvo en una parada impresionante
justo frente a Andy y Catlin. La potranca estaba sudando, excitación, eso era todo; y
golpeó con los cascos y cambió de posición en cuanto ella bajó mientras Andy sostenía el
animal.
Todos estaban impresionados. El tío Denys estaba blanco como el papel, pero se
portaba muy bien, de todos modos. Amy y los demás querían probar también pero Andy
dijo que era mejor que la potranca no tuviera muchos jinetes en un solo día. Se marearía
un poco. Florian dijo que podían ir cuando él estuviera ejercitando y que podían hacerlo
de uno en uno, si querían.
Además, continuó Florian, la mejor manera de aprender cosas sobre los caballos era
trabajar con ellos. La yegua iba a dar a luz otra vez y estaban haciendo otros dos
genotipos totalmente distintos en los tanques; y con ésos tendrían siete caballos en total,
ya no eran Experimentales, ahora eran oficialmente Animales de Trabajo.
De éstos, la potranca había sido la primera. Ari la palmeó, con fuerza, una palmada
sólida; a la potranca le gustaba saber que la estaban tocando; y ella tenía olor a caballo
en todo el cuerpo, pero le gustaba; le gustaba todo, incluso fue a darle un abrazo al tío
Denys.
 Has sido muy valiente  le dijo al tío cuando lo abrazó, y en un impulso, lo besó en la
mejilla y le sonrió. El olor se pasó a él también . Tu conejito de indias favorito no se ha
roto el cuello.
El tío Denys parecía totalmente sorprendido. Pero ella lo había murmurado.
 Incluso su misma entonación  dijo él, desequilibrándola a ella . Dios. A veces eres
extraña, jovencita.
IX
 Ahí está  dijo Justin cuando los resultados de la elección de Cyteen aparecieron en
la pantalla . Vídeo fuera  indicó al Cuidador . Khalid.
Grant meneó la cabeza, y no dijo nada durante un largo rato.
 Bueno, es una manera muy rara de hacer negocios  comentó después.
 Los contratos de Defensa en el Departamento de Comercio, en Finanzas.
 Reseune también tiene contactos allí.
 Va a ser interesante.
Grant inclinó la cabeza, se pasó una mano por el cuello y descansó un momento.
Pensaba, claro, que iba a pasar mucho tiempo, muchísimo tiempo hasta que cualquiera
de los dos pudiera viajar a Planys. [ Pobierz całość w formacie PDF ]

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